Con 3 o 4 años Mario y Paula eran ya grandes devoradores de películas disney, pero aún no siempre capaces de entender toda la complejidad que en ellas se encontraba, así que después de haber visto" La Bella y la Bestia" tuve que explicarles que las apariencias engañan y no siempre todo lo “feo y antiestético” es malo…
Días despúes, paseando por la calle, Mario, entusiasmado por haber llegado a comprender las explicaciones de su madre, exclamó a voz en grito:
- ¡Mira mamá, No es mala esa teñoda (señora)….sólo fea!
No hay comentarios:
Publicar un comentario